domingo, 5 de junio de 2011

la infancia

tras 10 km en llano ayer y 10 km con cuestas hoy... hoy toca articulo de melancolia...

Otro día de pesadilla… el trabajo va más lento de lo que quieres, nadie coge tus llamadas, el jefe te manda un correo con ese sarcasmo sibilino que solo los jefes saben aplicar, mendigas en el trabajo que te dejen el ordenador, que sueles usar por turnos…uff…entonces lo sientes perfectamente…es como si el corazón se te encogiera … respiras …pero el corazón no ensancha y en vez de una manzana roja y grande lo visualizas como los restos de una manzana que se acaba de comer tu perro… vaya… respiras de nuevo y continuas la tarea… pero la marea que acaba de encogerte el corazón ahora te llega a la cabeza… tu amiga se ha enfadado porque hace seis días que no la llamas, tu novio hoy está demasiado ocupado, no te ha dado tiempo a ir al gimnasio, tu madre te abruma con su hiperactividad, tienes dos bodas en quince días y no sabes que ponerte, te sientes fea… uff…vas al baño y casi sin quererlo tu mirada se cruza con el espejo …madre mía … tus ojeras se han desbordado, entre las manchas de la edad y el acné no te reconoces la cara y tienes unas raíces en el pelo que ya no son raíces, son ramas de árbol en flor… respiras otra vez mientras pasas al baño y mientras el chorrito intenta salir … respiras de nuevo… lo notas perfectamente, una inmensa ola, un tsunami se arrastra por tu cerebro y amenaza con llevárselo todo por delante…uff… algunos lo llaman estrés, otros ataque de ansiedad, cansancio, exceso de trabajo, de responsabilidad… yo lo llamo realidad , todo eso que conforma tu rato de angustia vital es ni más ni menos que la realidad… el problema es que se agolpa…cuando las circunstancias de tu existencia vienen a ti una a una simplemente se ordenan en tu cabeza y utilizas la lógica para metarlas cada una en un cajoncito , como si se tratase de un panal, de un tetrix que puedes ir organizando …pero algunos días, en algún momento, todo se empeña en venir a tu cerebro, a tu corazón y a tu cuerpo, al mismo tiempo… es entonces cuando sientes que una mujer de 53 kilos por muy en forma que esté no podrá con todo ese peso… es entonces cuando boom… todo salta por los aires…la línea entre el equilibrio y el desquiciamiento es tan fina que reto a cualquiera a intentar verla con antelación… es imposible… Solo si escuchas tu cuerpo sabes que en ese mismo instante, ahí mismo, estás traspasándola… entonces intentas hacer caso a todas esas cosas que has leído en internet, INSPIRE LENTO Y CON FUERZA y luego expire, inspire, expire…y empiezas a notar además de todo lo que sentías antes- el corazón estrecho , la cara hecha un cuadro y el tsunami en la cabeza- una extraña sensación placentera de mareo, como si te hubieran dado un chute morfina que te impide andar en línea recta… Yo entonces me siento, me evado de todo lo que me rodea y viene a mi cabeza una frase de RILKE….la verdadera patria es la infancia…. Me acuerdo, como en un recuerdo vago pero al tiempo preciso de un gran campo de amapolas, al lado de la casa de mis abuelos…es una sensación placentera, de calma absoluta…visualizo las flores y siento como el cuerpo se me despeja… me visualizo en un andar lento pero a gusto entre las flores y las espigas , todavía verdes… de la mano de mi abuelo… no sé si el recuerdo es real o inventado… no se si lo he fabricado a lo largo de los años como una especie de placebo …pero os aseguro que funciona … que funciona más que cualquier otra cosa, funciona por encima del tai-chi, la acupuntura, el psicoanalista o el valium… mantengo en mi cabeza las amapolas, mientras vuelvo a la realidad… el gato se te ha escapado esta mañana en busca de una gatita que ya anda con el celo subido, te quieren bajar el sueldo un cinco por ciento, en el trabajo intentan hacerte la cama para que te des de baja por depresión, como tantas otras…uff…sonrío… sonrío … BENDITA INFANCIA DE AMAPOLAS ROJAS

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Es bueno tener un campo de amapolas a mano, yo nunca llego, me quedo en inspira profundamente, suelta el aire, coge aire... y llego a la hiperventilación. Seguimos con valium y entonces llego al campo de amapolas. Son caminos distintos pero el mismo destino :)

Anónimo dijo...

Que no puedan contigo.